Sobre los 16 años leí el libro de Marlo Morgan “Las Voces del Desierto”, siempre lo recuerdo, y aunque ya en esa época leía muchos libros de psicología emocional, ciencia cuántica y temas relacionados con el desarrollo personal, éste libro me marcó de una manera sobrenatural, fue mi guía durante mucho tiempo, me inspiró y siempre lo recomendaba.

Soy la tercera de cuatro hermanos, y en casa cuando algunos enfermábamos, mi madre nos curaba con infusiones, miel, limón y remedios naturales, supongo que eso me caló y con 27 años decidí abrir mi propio herbolario, fue toda una experiencia de aprendizaje y de mucho, mucho esfuerzo y trabajo.

Allí inicié mis primeros talleres a los que llamé “Evolución Personal”

Por supuesto también tengo que decir que antes de esto, realicé infinidad de trabajos que nada tenían que ver con la nutrición o el desarrollo personal.

No siempre trabajé en lo que quería, pero nunca di la espalda a lo que realmente me motivaba. 

Me costó mucho tiempo darme cuenta de que, una vida no tiene por qué ser perfecta, para poder ofrecerle algo bueno a los demás.

Mis propias limitaciones físicas han servido para que siga queriendo aprender y mejorar.

Hoy tengo 43 años, y tras pasar varios años de introspección, donde tuve que dejar de trabajar por distintas patologías y lesiones musculares, decidí que ya había llegado el momento…

¡Era hora de Reiniciarme!

Mi proyecto habla de mi propia experiencia como terapeuta, y de mi propia experiencia como ser humano, no siempre fue fácil, pero las ganas de querer mejorar a nivel físico y emocional han hecho de mí lo que hoy soy.

Ahora me dedico a lo que más me gusta, escribir y poder servir de ayuda a los demás, y  ello me ofrece la posibilidad de superarme, me ayuda a entender nuevas perspectivas, a parar y reflexionar cuando hay algo que se me atasca, es motivador y es el motor que activa en mí la inspiración para mejorar mi propia vida.